En esta sección conozca un poco más sobre nuestra congregación y orígenes.

Sobre las iglesias locales

Es importante notar que jamás en la Biblia se identifica a una iglesia como a una secta, denominación, asociación de congregaciones o grupo de iglesias. Todos los títulos utilizados por tales grupos, como Iglesia Anglicana, Iglesia Luterana, Iglesia Prebisteriana, Iglesia Ortodoxa, etc., son extraños a la Biblia.

En la Biblia, tampoco se le da el nombre de Iglesia al edificio donde se congregan los creyentes. ¿Dónde se reunían los cristianos? Las iglesias se reunían al. principio en el patio del Templo, en sinagogas y en casas. En Hechos 19:9 tenemos un punto importante con relación al hecho de utilizar las sinagogas para reuniones de cristianos. "...Pablo en la sinagoga, habló con denuedo por espacio de tres meses...pero...se apartó Pablo de ellos, y SEPARÓ A LOS DISCÍPULOS, discutiendo cada día en la escuela de uno llamado Tiranno". Después de esto JAMÁS se hace referencia a Pablo entrando en una sinagoga. Se habla de reuniones de la iglesia en casa, edificios públicos como la Escuela de Tiranno, y en un edificio de tres plantas en Troas (Hechos 20:9). La ausencia de detalles en cuanto al edificio en sí, hace hincapié en que es más importante la congregación misma que el edificio en que se reúna.

El ornato de un edificio no asegura la presencia de Dios. Tampoco hay santidad en el edificio, pero sí, hay santidad en la asamblea, porque la presencia del Señor santifica el lugar. No es el lugar de congregarse el que establece que la reunión sea una iglesia; es la condición de los reunidos. En una CASA PARTICULAR, el padre de familia es cabeza de su hogar. Pero cuando los creyentes se reúnen en el mismo sitio para el culto, congregándose en el nombre del Señor Jesucristo para poner en práctica sus instrucciones, en el mismo momento de empezar, la condición de aquél lugar se transforma en CASA DE DIOS donde Cristo es cabeza. Al terminar la reunión, el lugar sigue siendo una mera casa particular.

Cuando se establece un edificio especial para las reuniones de una iglesia, ya sea alquilado o propio, ¿cómo se debe llamar? Las palabras Templo, Tabernáculo y Capilla se utilizan mucho hoy día, pero son palabras que se refieren a un edificio supuestamente santo, a un santuario. Por consiguiente no convienen, por cuanto el edificio en sí no es santo. No negamos que para fines oficiales, el mundo trata un edificio donde se reúne cualquier iglesia como una Capilla, no importa el nombre que lleve.  Algunos, para evitar nombres que no concuerdan con las enseñanzas bíblicas, llaman el lugar Local Evangélico, Sala Evangélica, Centro Bíblico, Local Bíblico, o Edificio Evangélico.

En cuanto a su forma física, no hay planos bíblicos como en el Tabernáculo. Las formas de torres, cúpulas, cruces y campanas son tradiciones religiosas que provienen mayormente de Roma, y se prestan más a la vanagloria que a la humildad de Cristo. La religión romana es famosa por su desperdicio de dinero con suntuosidad, pompa y demás extravagancias. No debemos malgastar dinero en lujo, ni en adornos. Pero a la vez, el edificio donde se reúne la iglesia no debe ser de menor calidad que las casas donde viven los creyentes. En una asamblea de indígenas, un edificio rústico sería sitio adecuado para dar buen testimonio donde manifestar la santa presencia de Dios. Pero en una ciudad moderna, una construcción inferior a las que rodean no da buen testimonio; debemos hacer cómodo, nítido y bien ventilado el lugar de reunión, (Lucas dice en Hechos 20:8 que "había muchas lámparas en el aposento alto... y Eutico, que estaba sentado en la ventana, rendido de un sueño profundo... " Este comentario es una advertencia en contra de la falta de ventilación, donde el calor produce sueño). También debemos procurar mantener el edificio bien pintado y aseado, como digno de los santos.

Neal R. Thomson.

Nuestros inicios

Nuestra congregación celebró su primera "Cena del Señor" el 19 de febrero de 1950, en el sector La Loma, de El Manicomio, en Caracas.

Por razones de espacio y comodidad, la congregación se mudó al sector Los Higuitos, de Los Flores de Catia, en Caracas; el 22 de octubre de 1977 se inauguró el Local Evangélico en el que actualmente nos congregamos en el Nombre del Señor Jesucristo.

Algunos hermanos de la asamblea de La Loma (1954) 
Algunos hermanos de la asamblea en Los Flores (2024)